Antes de detallar cómo han elegido los alumnos el personaje que les va a ayudar a atrapar al villano que ha robado el cuadro de la Mona Lisa, voy a explicar el proceso que me ha llevado hasta aquí.
Yo tenía claro que este año quería hacer algo distinto a los anteriores, algo que les atrapase por novedoso. Por lo que decidí probar con una historia que fuesen creando ellos, que fuesen los protagonistas, que con tiradas de dados el azar jugase su parte. En tercero de primaria, trabajar la expresión oral, la creatividad, la improvisación, el respeto a los compañeros para ponerse de acuerdo, era algo que yo me había propuesto trabajar en profundidad, así que empecé a crear la historia que ya he contado en anteriores escritos.
Primero pensé que cómo eran superhéroes, cada uno podía ser uno distinto, así que creé 29 tarjetas con distinto superhéroes del mundo Marvel.
La mitad del verano estuve atascada pensando cómo podía llevar a cabo la historia, ¿29? Era una locura, pero no sabía cómo arreglarlo. Así que, desesperada, llamé a Pepe, gran master y amigo, el cual me dio las claves para poder ponerlo en marcha. En clase iba a tener 7 equipos, había que hacer un superhéroe por cada equipo y que cada uno se pusiese de acuerdo con sus compañeros para elegir sus movimientos. Era mucho más coherente, pocos personajes para una historia.
Me pareció una gran idea, así que con nuevas claves y con la cabeza despejada me puse manos a la obra con este nuevo formato.
Todos los años llevo a cabo un plan de comportamiento individual, en el cual van sumando euros (doblones...) según su comportamiento, trato a los compañeros, trabajo en clase... Este año, esos euros iban a servir para contratar agentes con poderes especiales para que les ayudasen a cumplir con su misión. Y así, llegamos al aula.
La elección de personaje la llevaron a cabo en las primeras semanas de curso, cuando les presenté su primera misión. Cada equipo juntó los euros que habían ganado individualmente. Como llevábamos poco tiempo de clase, la suma del dinero no llegaba a 20€, por lo que todos los equipos tuvieron que elegir entre los superhéroes del nivel 1.
Estaban totalmente emocionados, ya tenían ayudantes, y con ¡poderes!
Cada equipo eligió el que más le gustó, y entre ellos se pusieron de acuerdo para que todos fuesen elegidos por algún equipo por si necesitaban las habilidades de todos para superar retos.
Semanas después y llegando al final de la misión dentro del museo, decidí que hiciesen su ficha de personaje, para que tuviesen más presente las habilidades y poderes de cada uno de ellos.
Realizamos entre todos la ficha, intentando detallar las habilidades y los puntos de ataque, velocidad...
Hago un inciso para decir que el dado que van a utilizar para decidir su futuro es un D20, por lo que todos los valores de sus acciones van a ser inferiores a este número.
También aproveché la ficha para trabajar competencias lingüísticas como hacer una lista y una descripción. Podían llevar junto con sus personajes cuatro cosas que ellos creyesen que les iban a ser útiles, así que recordamos cómo se hacía una lista y la escribimos con guiones para separar los elementos.
Para terminar este proceso se dispusieron a describir a su personaje en equipo. Primero le dibujaron y luego le describieron. Este trabajo lo hicieron en grupo con la técnica de "folio giratorio". Entre todos tenían que poner todas las partes de la descripción, leemos el escrito que nos llega y continuamos con el mismo. Así, hasta que todos estén completos.
Esta semana que entra realizaremos la búsqueda del villano en el museo con la ayuda de nuestros superhéroes, pero esa es otra historia que deberá ser contada en otro momento.
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